¿Por qué existimos?
Existimos basados en los principios fundamentales de la doctrina social de la Iglesia, porque era, es y siempre será necesario recuperar
alimentos, servicios y otros bienes básicos de consumo humano, para dignificarlos y entregarlos adecuadamente a las comunidades más vulnerables, que en muchas ocasiones padecen hambre y desnutrición. De esta manera contribuimos al mejoramiento de su calidad de vida y estaremos alimentando espiritualmente sus almas.